lunes, 31 de mayo de 2010

¿Existe la boda perfecta?

La boda perfecta existe en las mentes y los corazones de la novia y el novio. Planear una boda perfecta pasa por encontrar la forma en la que los novios comuniquen su amor, sus expectativas y las costumbres que deseen incorporar como parte de su futura vida.

Hay muchas vueltas en el camino hacia la planificación de la boda perfecta. Es importante entender que el estilo de la ceremonia dicta diferentes recomendaciones que deben seguirse. Hay grandes expectativas asociadas con cada uno y les toca a los novios poner de su parte.

Una ceremonia religiosa se considera una boda muy tradicional. Tendría lugar en una casa de culto, como una iglesia o sinagoga. Sería oficiada por un rabino, un ministro o miembro del clero. Para ceremonias religiosas tradicionales se suelen pedir ropas formales, ya que se trata de un acto con un considerable número de asistentes y la música es muy tradicional.

Para celebrar ceremonias civiles o no tradicionales, pueden ser en cualquier lugar, como a bordo de un yate, en un acantilado, en una playa o incluso en un patio trasero de la familia. La persona que debe oficiar este acto normalmente es un juez de paz (incluidos familiares o amigos que han sido certificados). Respecto a la ropa, no hay un tema concreto en la ceremonia civil o no tradicional, las parejas nupciales pueden llevar ropa de playa, renacimiento o incluso casarse a caballo.

Las diferencias entre ambos son la rigidez de la forma de la primera y la libertad de la segunda. La pareja de novios determinará cuáles son sus prioridades y el tipo de ceremonia que quieren tener. La familiaridad con los temas tradicionales y las ceremonias son importantes cuando se trata de bodas religiosas. En cambio, en las civiles o no tradicionales prima el sentido de aventura y diversión.

Si los novios toman conciencia de la gran variedad de opciones disponibles para elegir entre las opciones de su boda, esto será la clave para planear la boda perfecta, escuchando los sueños y expectativas el uno del otro.

Actualización:
Nos ha parecido muy interesante la gran cantidad de chinos que celebran sus bodas en España