Está de más decir que el día de tu boda es uno de los más importantes de tu vida. Este es un evento que requiere planificación previa y exige muchos preparativos. Pero a pesar de que lleves un control, es inevitable que se te escapen detalles o que algo falle.
Si se presenta alguna dificultad, lo primero es no perder la paciencia ni los nervios. Puedes tener una mancha en el vestido, que se te rompan los zapatos o que el velo se te caiga, que se dañe el coche, o que el DJ se enferme, por lo tanto, para que no te entre un ataque de nervios, te damos algunos consejos.
- Si tu vestido tiene una mancha, lo mejor es aplica talco.
- Asegúrate que el coche de la boda esté en buen estado, y ten a mano el móvil por si algo sale mal.
- Si el maquillaje de bodas luce espantoso, lo mejor es que tengas a mano tu propio estuche.
- Si la boda se hace fuera de tu ciudad, procura que alguien lleve al cura o al juez.
- En caso que tus padrinos sean unos despistados y se olviden los anillos, trata de tener algún objeto reemplazable.
- Si has lanzado el ramo y te has quedado con las manos vacías, que no te mate el pánico, puedes coger unas flores del centro de mesa para que te saque de aprietos.
- A muchas novias se les puede romper un tacón del zapato. Lo mejor es que lleves unas sandalias de repuesto.
- Si tus músicos no se presentan, lo mejor es que seas previsora, y que desde día antes hagas una selección con la música de tu boda.
Imagen: fotolog.com
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